La heredera del imperio de Amancio Ortega, Marta Ortega Pérez, ya está haciendo notar el cambio de manos en la firma textil creadora de marcas como Zara.
En la última Junta de Accionistas, que se llevó a cabo el lunes, se anunciaron nuevos objetivos globales de sustentabilidad. Vale la pena recordar que la presidenta de Inditex está intentando cambiar la imagen de «fast fashion» que hizo popular a la firma (y que convirtió a su padre en uno de los hombres más ricos del mundo)
En resumen, Inditex reducirá el conjunto de las emisiones de su cadena de valor en un 50% en 2030 (para alcanzar las cero emisiones netas en 2040), extenderá los proyectos de circularidad y desarrollará iniciativas para contribuir a mejorar la biodiversidad con la recuperación y regeneración de al menos cinco millones de hectáreas en diversas partes del mundo.
Las cuatro líneas de acción prioritarias que estableció el Grupo para ello son las siguientes:
- Utilización de materiales textiles con menor impacto medioambiental: en 2030, en torno a un 40% de las fibras utilizadas por las marcas de Inditex serán resultado de procesos de reciclaje convencional; alrededor de un 25% serán fibras de nueva generación (en parte escaladas en colaboración con las start-ups detectadas a través del Inditex Sustainability Innovation Hub) y otro 25% procederán de agricultura orgánica o regenerativa.
- Impulsar el plan de transformación de la cadena de suministro, tanto en la parte social, a través de la estrategia “El trabajador en el centro”; como en la parte medioambiental, centrados en agua, vertidos, gestión de productos químicos y energía.
- Apoyar proyectos para proteger, restaurar o regenerar hasta 5 millones de hectáreas y contribuir a mejorar la biodiversidad.
- Seguir extendiendo iniciativas de circularidad como Zara Pre-Owned.
Estas y otras iniciativas permitirán reducir las emisiones más de un 50% en 2030, hacia el objetivo de conseguir las emisiones neutras en 2040 con al menos un 90% de reducción.