La tenista norteamericana, Serena Williams, siempre fue consciente de su rol como modelo a seguir tanto como deportista como empresaria -es una de las mujeres mejor pagas de la historia- y también reflejó eso en su estilo personal dentro y fuera de la cancha. Ahora lo hará también desde su propia línea de belleza, WYN BEAUTY, que oficialmente se estrenó hoy a nivel mundial.
Al verla festejar el reves de Grigor Dimitrov y la victoria de Jannik Sinner en el Abierto de Miami la semana pasada, sabíamos que su reaparición no debía ser casualidad. La absoluta reina de las canchas nunca deja puntada sin hilo, y si se tomó un break de pasar tiempo con su hija no era solo para ver tenis.
Su marca de belleza WYN Beauty se lanza oficialmente hoy y se presenta como «maquillaje en el que te puedes mover». La premisa de la firma es que el maquillaje es para presentar la mejor versión de uno mismo, y por eso debe ser para la vida y no solo para el look de la foto.
«Estamos comprometidos a vivir en colores con confianza» declaran, y aseguran que habrá tonos más profundos como punto de partida, para que todos los tipos de pieles puedan encontrar el suyo. Los productos se desarrollaron junto al gigante de belleza, Ulta Beauty.
Otra cuestión fundamental será el propósito de la marca: Serena tuvo una experiencia muy compleja en la que casi fallece al dar a luz a su hija. Por eso, promete que WYN mantendrá un compromiso con aquellas organizaciones que provean cuidados de maternidad a mujeres y sus comunidades.
Fuera de estas cuestiones protocolares, los productos rondan los 19 o 20 dólares. Por esos precios se pueden adquirir las máscaras, los delineadores de cejas o los labiales de la marca de Serena Williams. El más caro, a 29 dólares, es la base humectante.
Por Paula Krizanovic