La compañía de indumentaria y calzado deportivo y urbano, adidas Argentina, participó junto con su Green Team y voluntarios en la recolección de residuos plásticos utilizados por los corredores en los 21K y 42K de Buenos Aires, las dos carreras más importantes del calendario anual que son organizadas por la Asociación Ñandú y tiene a la marca como uno de sus principales sponsors.
Green Teams son grupos de colaboradores y voluntarios internos de adidas que promueven la sustentabilidad en todos los aspectos de la vida de la empresa. Actúan como verdaderos embajadores que representan modelos de conductas y aportan ideas para llevar a cabo acciones que impulsen una mejora continua y contribuyan con un futuro más amigable con el medio ambiente.
De este modo, adidas reafirma su compromiso con la sustentabilidad para lograr la neutralidad climática de sus operaciones globales para 2050.
Con más de 20.000 inscriptos en la Media Maratón de Buenos Aires y casi 9.000 en la Maratón Internacional de Buenos Aires, estos embajadores de la sustentabilidad se hicieron presentes en las carreras más convocantes de la Ciudad.
En este caso, su misión fue la recolección de residuos plásticos post-maratones y la invitación a todos los corredores a colaborar en la limpieza. La acción contó con la colaboración de la cooperativa El Álamo y tuvo como premisa asegurar que los mismos no se transformen en desechos y sean utilizados como materia prima para la generación de otros productos. Entre ambos eventos se logró recolectar 2.7 toneladas de plástico.
Reciclado de remeras adidas
Además, adidas acompañó a los corredores con sus clásicas remeras, que, a diferencia del año anterior, fueron producidas con materiales reciclados.
La utilización de estos materiales, como el poliéster reciclado, produjo una disminución de 75.000 litros en el consumo de agua; de las 5 toneladas de tela utilizadas, provocó una reducción de 56% en el uso de energía y evitó que 15 botellas de PET de 500cc terminen en el océano.
En relación al proceso de teñido, hubo una disminución del 56% en el consumo de energía, del 70 % de químicos auxiliares utilizados y se redujo el consumo del agua en un 37%, equivalentes a 2 litros y medio por prenda.